En la Copa América 2019, se presenciaron varios encuentros llenos de emoción, con goles y controversias. Se rememora especialmente la famosa expulsión de Lionel Messi ante Chile, tras un enfrentamiento con Gary Medel. Sin embargo, lo más destacado del torneo fue la polémica en torno a los dos penales que no se le concedieron a la selección argentina frente a Brasil en una de las semifinales.
En aquella ocasión, Brasil derrotó a Argentina 2-0, pero el árbitro ecuatoriano Roddy Zambrano quedó bajo escrutinio por no recurrir al VAR para revisar las faltas sufridas por Sergio "Kun" Agüero y Nicolás Otamendi, como luego señaló Lionel Messi en conferencia de prensa.
Messi expresó su frustración ante los medios, cuestionando el arbitraje del "Clásico Sudamericano": "Durante toda la Copa América se encargaron de sancionar boludeces, pero hoy no cobraron un penal a Otamendi. Es algo para analizar".
En aquella polémica semifinal entre Brasil y Argentina, dos acciones desencadenaron la ira de Messi. Con el marcador 1-0 a favor de Brasil, Agüero chocó con Dani Alves sin que se señalara falta. La situación más evidente ocurrió cuando Brasil lideraba por dos goles: Otamendi fue golpeado por Arthur, pero Zambrano no pitó falta.
"Obviamente, hubo mucho revuelo en ese partido porque Argentina perdió. Me culparon a mí y hubo una jugada de penal. Todo el mundo lo sabe, era penal para Argentina. Yo no lo vi en el campo y el VAR no me llamó... Me dijeron que podía seguir el juego. Si hubiera visto la jugada en el VAR, la habría sancionado", afirmó Zambrano en una entrevista con Federación Postera.
Messi expresó su decepción tras la derrota: "Todas las boludeces se cobraron a favor de ellos". Aunque estuvo visiblemente molesto con el árbitro durante el partido, Zambrano reconoció que Messi no le faltó al respeto. "Me decía que las faltas pequeñas se cobraban en nuestra contra. Pero nunca me faltó al respeto, no me insultó ni fue grosero", comentó.
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