La Liga Profesional introducirá una nueva medida a partir de la fecha 14 del torneo que afectará tanto a los futbolistas como a los árbitros de campo, que es la zona exclusiva para capitanes.
La regla establece que "solo el capitán de cada equipo tendrá permiso para acercarse a los árbitros" en decisiones cruciales. Esta medida tiene como objetivo reducir los tumultos que suelen ocurrir cuando los jugadores de ambos equipos protestan ante una decisión arbitral.
La implementación de la "zona exclusiva para capitanes" comenzará en la próxima jornada de la Liga, después de la doble fecha de Eliminatorias Sudamericanas. En esta zona, solo los capitanes podrán dialogar con el árbitro.
Esta medida ya se había aplicado en la Eurocopa de Alemania 2024 y fue replicada en otros torneos, como el fútbol en los Juegos Olímpicos de París 2024.
En caso de que el capitán sea el arquero, se informará al árbitro antes del inicio del partido quién será el jugador designado para acercarse a dialogar. Si el capitán es expulsado, se seleccionará a otro jugador para asumir este rol. El protocolo que acompaña la medida señala que su propósito es "evitar que los jugadores rodeen o acosen al árbitro en situaciones trascendentales".
"Solo un jugador de cada equipo, que será el capitán, podrá aproximarse al árbitro y, cuando lo haga, deberá interactuar con él de manera respetuosa," señala el protocolo. Además, el árbitro "podrá indicar a los jugadores (con palabras o gestos) que no se le acerquen."
Los capitanes también tendrán la responsabilidad de asegurarse de que sus compañeros no se acerquen al árbitro. En caso de que lo hagan, estos jugadores serán amonestados con tarjeta amarilla. Si el árbitro lo considera necesario, podrá retrasar la reanudación del partido para dar tiempo a los capitanes a explicar la decisión a sus compañeros y exigirles que se comporten de manera adecuada.
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